Las entidades bancarias encargadas del pago a jubilados y asignaciones sociales volverán a abrir mañana sus sucursales en su horario habitual, aunque lo harán con ciertas restricciones y medidas de seguridad e higiene para evitar el contagio del coronavirus.
Sólo se atenderá a personas que no cuenten con su tarjeta de débito o que esté inhabilitada para la extracción de efectivo o realización de otros trámites disponibles vía cajeros automáticos, terminales de autoservicio o canales digitales (home banking, aplicaciones y redes sociales).
La atención se organizará de acuerdo al cronograma de pagos dictaminado por Anses y, con el objetivo de evitar aglomeraciones de personas en las sucursales, cada banco establecerá criterios para mantener el distanciamiento social y preventivo recomendado por el Ministerio de Salud.
En base a lo informado por las distintas entidades, el Banco Credicoop precisó que dispondrá un límite de ingreso de tres personas por sucursal mientras que otros bancos como el Santander señalaron que reforzarán el personal de seguridad de cada sucursal para hacer respetar una “distancia de dos metros entre cada cliente”.
Por su parte, el Banco Ciudad establecerá un “protocolo de atención y cuidados” que, además de la provisión de elementos sanitarios y un incremento en procedimientos de higiene y desinfección de las instalaciones, incluirá la atención “por orden de llegada y el otorgamiento de un número electrónico”.
“Sólo tendrán prioridad en la atención las personas vulnerables, de acuerdo con las resoluciones sanitarias”, informó Banco Ciudad.
En caso de ser necesario se organizarán filas de espera fuera de las sucursales, donde las personas deberán mantener la distancia de al menos un metro y medio entre los integrantes de la fila y que se derivará a los cajeros automáticos a todos los que posean tarjeta de débito.
Durante los próximos días, los bancos dispondrán una dotación mínima de empleados voluntarios, que no incluirá a personas de riesgo y personal con hijos a su cuidado por la suspensión del dictado de clase, por lo que no brindarán por el momento ningún otro servicio que no sea pago de haberes jubilatorios o programas de la seguridad social.
Por este motivo, el Banco Provincia recomendó que los adultos mayores traten de evitar ir a las sucursales y lo hagan sólo cuando no sea posible usar el cajero para cobrar.
“Siempre es mejor que un apoderado pueda ocuparse en lugar del beneficiario. Ir al banco es la excepción, la regla siempre es quedarse en casa”, remarcaron desde la entidad bonaerense.
Los bancos encargados del pago de jubilados son: Nación; Supervielle; Macro; Provincia de Buenos Aires; Piano; Santiago del Estero; Patagonia; Industrial; Ciudad; Santa Fe; Córdoba; Crediccop; Entre Ríos; Columbia; BBVA, Santander; Galicia; San Juan; Tucumán; Del Chaco; Corrientes; La Pampa; Provincia de Neuquén; Comafi; Chubut; La Rioja; Municipal de Rosario; Santa Cruz, HSBC; y Tierra del Fuego.